Islas Jónicas: Corfú

 

Volvemos por las fabulosas islas griegas. Esta vez nos trasladamos hasta el oeste del país para visitar una de las islas Jónicas: Corfú. Playas de ensueño, rincones históricos y pueblos tradicionales que harán de viaje una experiencia inolvidable. ¡Comenzamos!

 

Se trata de la isla más septentrional y tan solo dos kilómetros la separan de Albania en su parte más estrecha. Es sorprendentemente verde y tiene muchísima vegetación y naturaleza, además de hermosas playas y numerosos lugares históricos.

 

 

Corfú, en griego Kerkyra y capital de la isla, bien merece una visita. La fortaleza antigua domina toda la ciudad y desde lo más alto puede contemplarse un espléndido panorama. El casco antiguo es un pintoresco laberinto de estrechas callejuelas donde se alinean casas antiguas de estilo veneciano y abundan pequeñas tiendas y restaurantes. En el centro hay varias plazas en las que destaca el colorido de sus fachadas y diversos lugares de interés, como la iglesia de San Spiridón. La explanada (Spianada) es una amplia zona verde que se extiende ante la fortaleza antigua y lugar de reunión de locales y visitantes. Los soportales situados a un lado de la plaza albergan un gran número de restaurantes y bares. Al sur de la ciudad se encuentra el palacio Achillion, el monumento más visitado de toda la isla y que fuera residencia de verano de la emperatriz Sissi.

 

Además de la capital hay muchos lugares en Corfú que debes apuntar en tu lista de imprescindibles. Teniendo en cuenta que el transporte público es lento y no demasiado frecuente, lo mejor es alquilar un coche un par de días y recorrer los mejores rincones de la isla; en el aeropuerto de Corfú encontrarás varias empresas de alquiler. En la costa oeste no te pierdas la fortaleza de Angelokastro y las playas de Paleokastritsa y Ermiones, en las que el azul turquesa de las aguas contrasta con la verde vegetación y las rocas que las rodean.

 

 

 

Si lo que buscas es adentrarte en la cultura local y descubrir lugares tradicionales Sinarades (a unos 11 km de Corfú) y Chlomos (a unos 25 km al sur de Corfú) no pueden faltar en tu visita. Sinarades es un pueblo con mucho encanto, coloridas casitas antiguas y una bonita plaza central y alberga el museo del folclore. Chlomos está situado en lo alto de una colina coronada por una iglesia y desde donde se observa buena parte de la costa sur de la isla. Aprovecha para degustar la deliciosa gastronomía local en alguna de las tabernas.

 

Tampoco puedes perderte una visita al lugar más alto de Corfú: el monte Pantócrator. Existen dos rutas para llegar pero, si quieres disfrutar de unas vistas espectaculares y darle más emoción al recorrido, realiza el itinerario pasando por Troumpeta y Zygos: carreteras sinuosas que cruzan pequeñas aldeas por calles imposibles… ¡toda una aventura!